Sistemas de extinción por gases inertes
Los sistemas de extinción por gases inertes utilizan gases de argón y nitrógeno y sus mezclas como agente extintor y se basan en el principio de reducir la concentración de oxígeno dentro del peligro protegido. La concentración de oxígeno se minimiza mediante la aplicación de gas inerte hasta que alcanza un nivel en el que ya no se sostiene la combustión. Cada sistema está diseñado para disminuir el oxígeno a un nivel específico. Cuando se descarga, el gas inerte se distribuye rápidamente y uniformemente dentro del recinto, logrando la concentración de diseño en 60 segundos.
El argón y el nitrógeno están presentes de forma natural en la atmósfera, por lo que su efecto invernadero es nulo y su potencial de agotamiento de la capa de ozono es igual a cero. Es químicamente inerte, no conductor, incoloro, inodoro e insípido. El gas inerte no es corrosivo y puede usarse a temperaturas normales con materiales como níquel, acero, acero inoxidable, cobre, latón, bronce y plásticos.
Estos gases nunca serán reclasificados como «residuos peligrosos» ni requerirán procedimientos de inspección especiales según las Regulaciones de gases «F» de la UE.
Los sistemas de extinción de incendios por gases inertes son la forma segura y natural de extinguir un incendio. Gracias a su exclusivo ensamblaje de válvula patentado, el agente de gas inerte ingresa a la sala protegida dentro de la industria en 60 segundos, pero a un caudal constante, lo que evita que se produzcan turbulencias destructivas.